Si bien toda la materia en el universo está formada por un número finito de átomos, éstos se hallan combinados y organizados a niveles tan densamente complejos, que se pierden de vista los bloques fundamentales de construcción de la misma. Es por ello que pueden identificarse capas o niveles de organización a medida que elevamos o disminuimos la escala.
Por ejemplo, un ser humano está hecho de átomos, sin duda, del mismo tipo de los que está hecho un planeta (convengamos que en el planeta habrá bastantes más átomos, dadas sus dimensiones), pero organizados de manera diferente. Lo mismo que entre un ser humano y una célula, pues el primero contiene millones de éstas.
De modo que la materia se encuentra organizada en niveles de complejidad que podemos enunciar por separado.
Los alumnos de 3º ESO han realizado un esquema de los diferentes niveles de organización de la materia viva, dentro de la asignatura Biología y Geología. Aquí publicamos una muestra del resultado del trabajo de una de nuestros alumnos de 3º A.B.C. utilizando las TIC.




